El Melilla Baloncesto logró una importante victoria en su lucha por disputar la Copa Princesa, tras imponerse este miércoles a Planasa Navarra por 75-83. Los melillenses cimentaron su victoria en un gran acierto exterior y del dominio del rebote ante un conjunto navarro que tuvo en Arteaga (39 val) su mayor amenaza. El mejor de los Decanos fue una vez más Brandon Edwards, quien firmo un doble-doble con 17 puntos y 10 rebotes.
Los navarros comenzaban mandando en el partido con un 5-0 de inicio pero rápidamente los de Alejandro Alcoba conseguían igualar la contienda gracias a varias defensas alternativas que conseguían frenar la producción local. Un triple de Pablo Almazán en el ecuador de este primer cuarto ponía a los de la Ciudad Autónoma por primera por delante en el marcador. (9-10). La igualdad y el duelo protagonizado por Arteaga-Edwards fueron la tónica predominante de este primer acto que concluía con un ajustado 17-18, con Melilla Baloncesto que dominaba en todas las facetas del juego pero que veía como las pérdidas de balón no le permitían sacar un mayor rédito.
Dos triples consecutivos al inicio del segundo cuarto por parte azulina daba un renta de siete puntos y colocar un 17-24 en el electrónico. Rápidamente reaccionaria Planasa Navarra de la mano de un inspirado Rodríguez y un fiable Arteaga desde el tiro libre para reducir la diferencia a un solo puntos (25-26, min 14). La tercera falta personal de Hernández-Sonseca a 4:30 para el descanso unido al acierto de Rodríguez, con cinco puntos consecutivos, por parte navarra daba nuevamente el mando en el marcador a los locales (33-30). Los melillenses volvieron a tirar de casta y dos acciones consecutivas de canasta y adicional por parte de Edwards, el mejor de los azulinos en esta primera mitad, y de Pablo Almazán conseguían poner al equipo por delante (37-39) a menos de un minuto pero Narros conseguía igualar la contienda al final de la primera mitad (39-39).
Arteaga comenzaba la segunda parte haciendo mucho daño en la pintura melillense (45-42, min 22), mientras el Decano no se encontraba cómodo en ataque. Un triple de Severa certificaba en el buen arranque de cuarto para los locales abría un brecha de seis puntos (50-44) transcurridos tres minutos. Apareció entonces el acierto exterior que faltó en otro encuentro, focalizados en la figura de Marcos Suka, quien con tres triple en penas cuatro minutos daba la vuelta al partido y obligaba a Lamua a solicitar tiempo muerto con el resultado de 54-59. Poco cambio el panorama hasta el final de este tercer acto que concluiría con el resultado de 59-66, tras una bandeja de Zengotitabengoa.
A pesar de la ventaja con la que contaban los melillenses, el inicio del último periodo fue negado de cara al aro, lo que aprovecharon los pamploneses para acercarse (63-69). Emergió entonces la figura del capital de la nave azulina, Eloy Almazán, quien con dos triples consecutivos desde la esquina daba tranquilidad al equipo (65-72). El Decano supo administrar esa diferencia a pesar de un Planasa Navarra que se encomendaba a Arteaga. Una canasta más adicional y posterior bandeja de Héctor Manzano a menos de un minuto certificaba la victoria de un Melilla Baloncesto que acabaría imponiéndose por 75-83.
Esta victoria en Navarra, unido a la derrota de Palma Air Europa en Oviedo, permite a los melillense depender de si mismos para poder disputar la Copa Princesa.
