Como si de un deja vú se tratase, el Melilla Baloncesto volvió a caer en una prórroga y de nuevo fuera de casa. En esta ocasión en el Barris Nord, ante Actel Força Lleida por 87-82, en un partido con muchas alternancias y donde el máximo anotador azulino fue Suka con 21 puntos.

El conjunto de la Ciudad Autónoma empezaba el encuentro muy metido en el partido tanto en defensa, robando varios balones, como en ataque con Arteaga haciéndose fuerte en la pintura para conseguir las primeras rentas (4-11, min. 4). Los de Alejandro Alcoba comenzaba a tener problemas en el rebote defensivo, concediendo segundas oportunidades a los locales que aprovechaban para acercarse en el marcador (10-11, min. 6). Manzano anotaba en el tramo final del encuentro para dejar las tablas en el marcador al final del primer acto (19-19).

Un parcial de 7-0 por parte ilerdense marcó el inicio del segundo acto. Melilla Baloncesto no se encontraba cómodo en ataque ante la cerrada defensa local. La aparición de van Wijk fue fundamental para aguantar a los de Alejandro Alcoba en el partido llegado el ecuador del segundo cuarto (29-27). Dos triples consecutivos del Decano daban la vuelta al electrónico y ponía de nuevo al equipo por delante (32-35), pero un triple de más de ocho metros de Nevels, el más acertado en ataque de los catalanes, en las postrimerías del primer tiempo dejaba el encuentro empatado a 35.

El segundo tiempo comenzaba con un Martí muy inspirado y permitiendo a su equipo ir por delante (42-37, min. 23). Melilla Baloncesto apretaba e iba a por el partido, pero Nevels contenía los ímpetus azulinos. Rivero cogía la batuta del partido y con once puntos en los tres últimos minutos del cuarto, daba la ventaja de nuevo al Decano (53-57).

En el arranque del último cuarto Sutina aguantaba a los locales en el marcador, a pesar de los intentos azulinos por despegarse (62-64, min. 34)). Dos triples de Suka y una canasta Rivera ponía el partido de cara al equipo (68-73). Una canasta de Mbaye y triple de Demetrio empataba el encuentro a 73 a falta de 20 segundos. Rivero anotaba dos tiros libres, pero Nevels empataba el encuentro y mandaba el encuentro a la prórroga (75-75).

Ya en el tiempo extra, Melilla Baloncesto no se sintió cómodo y fue a remolque, siempre a la desesperada. Con 83-81, y a un minuto para el final, Suka intentó darle la vuelta al marcador, pero falló su lanzamiento triple. Posteriormente Nevels anotó y dejó prácticamente sentenciando el encuentro. Los azulinos lo intentaron, pero todo estaba decidido y volvieron a caer en una prórroga, esta vez por 87-82.


RUEDA DE PRENSA – ALEJANDRO ALCOBA