El Club Melilla Baloncesto llegaba con la necesidad de ganar tras las victorias de sus rivales directos en la lucha por la permanencia. Pero no sería nada fácil frente a un equipo que está luchando por meterse en los playoffs de ascenso a ACB.

El partido comenzó con un Gipuzkoa muy enchufado en ambos lados de la pista, con una defensa que no permitía a los melillenses encontrar huecos por donde meter el balón en la zona, además de tener un gran porcentaje en tiros. Esto hacía que enseguida abrieran una ventaja de 8 puntos (6-14). La diferencia prácticamente estaba intacta en el ecuador del primer cuarto (8-16). Después de que los visitantes consiguieran la máxima ventaja del partido (11-22) los de Gonzalo García de Vitoria reaccionaban y bajaban la diferencia a 7 puntos en el minuto final del cuarto. Distancia que se mantuvo hasta que finalizó el mismo, el resultado de los primeros 10 minutos fue de 17-24. El decano carburó poco a poco y consiguió, al final del primer cuarto, encontrar el juego que habían planeado.

Los guipuzcoanos empezaban los segundos diez minutos de la misma manera que comenzaron los primeros, con un juego muy solido en defensa y con un alto acierto en desde el tiro exterior, esto propició que abrieran la máxima brecha en el choque (19-32). Esta ventaja la defendieron hasta el ecuador del mismo (23-35). Los últimos minutos de los melillenses fueron nefastos en ataque, con muy poco acierto, y en defensa con errores y una intensidad que no era la suficiente para parar el gran ataque que estaba realizando Gipuzkoa, de esta forma, los de Lorenzo Encinas se marchaban a túnel de vestuarios con la máxima diferencia en el partido (29-50). Con un parcial de cuarto devastador 12-26.

En el tercer cuarto el decano intentaba reducir la ventaja en los primeros minutos, con un ataque liderado por Trey Davis, pero la defensa dejaba mucho que desear y debido a esto la diferencia no bajó, sino que en el ecuador aumentó en dos puntos (44-67). La segunda parte del cuarto siguió por la misma línea, Melilla no conseguía reducir la ventaja que los guipuzcoanos habían conseguido en los primeros 20 minutos, de esta forma los primeros 30 minutos terminaban con un resultado de 57-80.

El último cuarto no tuvo mucha historia, los de Gipuzkoa se mantenían la diferencia incluso conseguían aumentarla, con un Melilla Baloncesto que se resignaba tras una malísima primera parte, sobre todo en defensa. El resultado final del encuentro fue de 78-104.

El decano sufrió muchísimo en una primera parte que fue devastadora y a la postre decisiva. El próximo partido de los melillenses será, a domicilio, frente a Tau Castelló el viernes 21 de abril a las 20:45. En una nueva final para el decano.