Melilla Baloncesto sumó su cuarta victoria de la temporada tras imponerse en un serio partido al Actel Força Lleida por 75-65. Los de Alejandro Alcoba hicieron gala de una buena defensa y liderados por un imperial Oliver Arteaga, con 27 créditos de valoración, se impuso al equipo revelación de esta LEB Oro.

El duelo entre melillenses e ilerdense comenzaba muy igualado y con un protagonista por parte catalana, el pívot Papa Mbaye. El jugador formado en la cantera del FC Barcelona anotaba los ocho primero puntos de su equipo y mantenía a los Comenge igualados en el electrónico (8-8, min 4). Bajo la dirección de Rivero, Melilla Baloncesto comenzaba a notar y una canasta de Gatell ponía por primera vez en el partido a los azulinos por delante (12-11, min 6). El parcial aumentaría conseguir un renta de cinco puntos (16-11), diferencia que Actel Força Lleida bajaría hasta solo dos puntos al final del primer acto (20-18).

El segundo acto comenzaba con un Melilla Baloncesto jugando a un buen nivel pero fallón de cara al aro. Aun así, los de Alejandro Alcoba se mantenían por delante en el electrónico (22-21, min 12). El Decano comenzaría a despertar dos canastas consecutivas obligaba a Borja Comenge a parar el partido con 26-21 en el marcador y siete minutos para el descanso. Melilla baloncesto siguió creciendo en el partido desde la defensa con las diferentes alternativas que planteaba el técnico azulino. Con un triple de Sanz, el primero de los melillenses, ponía un esperanzador 36-26 en el marcador a menos de tres minutos para el final del segundo cuarto. La aparición de nuevo de Rivero con cuatro puntos consecutivos ponía máxima de partido al final de la primera mitad (40-26).

Los de la comarca del Segre subía la intensidad del partido nada más comenzar el tercer cuarto, haciendo bueno lo que hasta ahora les había a ser colíderes de la LEB Oro, la defensa. Así consiguieron un 0-5 de parcial de inicio para colocar el 40-31 en el marcador. El partido se volvía feo por momentos, con ambos equipos mucho más inspirados en la faceta defensiva, hasta la aparición de un inspirado Alfredo Ott, acertado desde la línea de triple, y que permitía al Decano marcharse a los últimos diez minutos con trece puntos de ventaja 54-41.

Melilla Baloncesto buscaba romper definitivamente el partido pero a cada canasta azulina, respondía rápidamente el conjunto del Actel Força Lleida para no permitir a los de ciudad autónoma irse en el marcador. La aparición en los minutos finales de Arteaga, haciéndose amo y señor en la pintura, permitía al equipo vencer por 75-65 y sumar su cuarta victoria de la temporada.