El Club Melilla Baloncesto ha hecho historia en el deporte melillense al lograr el primer ascenso de su historia. A la tercera fue la vencida y el conjunto de la Ciudad Autónoma se ha ganado el derecho a jugar en la Liga Endesa la próxima temporada, tras imponerse por 86-93 al CB Peñas Huesca en el tercer partido de la final.

El partido comenzaba con un Melilla Baloncesto similar al de los dos primeros partidos. Muy precipitado y sin encontrar su sitio en el partido. De hecho, prácticamente los seis primeros ataques azulinos acabaron en perdidas que los locales aprovecharon para lograr una primer renta (6-2. Min 7). La entrada en pista de Sanz dio otro ritmo a los de Alejandro Alcoba, mucho más agresivos en ataque, lo que provocaba numerosas faltas locales que los de la Ciudad Autónoma aprovechaban desde la línea de 4.60 metros para igualar el encuentro. Melilla Baloncesto iba a mas y un triple de Zengotitabengoa al final del primer acto ponía al equipo por primera por delante en el partido (20-22).

Los primeros instantes del segundo cuarto estuvieron dominados por un Hernández-Sonseca, al que los de Costa llevaban una y otra vez a la línea de tiros libres. Pero sería de la mano de Héctor Manzano cuando el equipo conseguiría su primera renta importante (27-34) a poco más de tres minutos para el descanso y que obligaba al técnico local a solicitar tiempo muerto. El parón sirvió para ordenar ideas en los de Costa que fueron muchos más agresivo en la defensa del bloqueo directo de los azulinos, al que le empezaba a costar a anotar de nuevo. Como ya ocurriera en el primer cuarto, un triple, en este de Colom para los peñista cerraba un primera parta a la que se llegaba con el resultado de 36-38.

Peñas Huesca había salvado su primera situación peliaguda del encuentro y volvía reforzado de los vestuarios. Tras un triple de Josep Franch, los oscenses encadenaban un 5-0 para conseguir la igualada a 41. La réplica visitante era similar e inmediata para volver a escaparse (41-46). A punto estuvo de volver a devolver el golpe el conjunto dirigido por Quim Costa, pero se quedaron a un punto y eso lo aprovechaba el francotirador Zengotitabengoa para enlazar dos triples seguidos y recuperar el +7 de Melilla Baloncesto (45-52). Y con el tercer triple del exterior los de Alejandro Alcoba amenazaban con romper el encuentro (47-55). Nueva situación crítica para un Peñas Huesca que, de nuevo, no bajaba los brazos para llegar con esperanzas al periodo final (54-59).

Repitiendo la historia del tercer periodo, la escuadra oscense comenzaba con fuerza el periodo para apretar el marcador (58-61). Un triple de Eloy Almazán permitía unos instantes de respiro a los melillenses. Pero eran muy pocos porque Cristian Díaz respondía desde la larga distancia (61-64). Jorge Sanz y Héctor Manzano se convertían en especialistas en ‘puerta atrás’ para ampliar la renta de un Melilla Baloncesto que veía como Hernández-Sonseca tenía que retirarse para ser atendido de un golpe (63-68). Quim Costa paraba el encuentro para insuflar los últimos ánimos y fuerzas a los suyos. Davis y Huskic, con el apoyo de la afición, provocaban esperanzas de remontada (68-70). Eran momentos claves, con menos de tres minutos para el final del encuentro, y Steinarsson apretaba aún más el marcador (71-72). El propio jugador fallaba después una bandeja que podía haber dado la vuelta al partido. Los nervios se traducían en fallos de tiros libres por parte de ambos contendientes. En este escenario, Steinarsson enloquecía a la afición oscense con un triple que ponía a Peñas Huesca por delante (75-74), pero en el siguiente ataque, Zengotita pisaba la línea lateral y a Cristian Díaz no le temblaba el pulso por partida doble (79-76). Pero quedaba la traca final: después una jugada embarullada, el balón llegaba a Asier Zengotitabengoa que anotaba el triple que forzaba la prórroga sobre la bocina.

Melilla había resucitado y encima golpeaba la moral de su rival anotando en el primer ataque del periodo extra. En esta situación, Goran Huskic ejercía de MVP y Cristian Díaz se mostraba agresivo en ataque para forzar personales y anotar desde la línea (86-83). Parecía que la dinámica del encuentro había cambiado, pero el destino le guardaba a Melilla Baloncesto un histórico desenlace. Un mate de Gatell certificaba la victoria melillense y primer ascenso a la Liga Endesa de la historia del club.