El Club Melilla Baloncesto no pudo iniciar de mejor manera el curso baloncestístico que con un importante triunfo en la siempre complicada cancha del Chocolates Trapa Palencia, al que se impusieron por 69-81. Un gran tercer cuarto de los hombres de Alcoba, que estuvieron muy serios durante todo el encuentro, fue la clave de una victoria que tuvo en Fede Uclés al jugador más valorado del Decano con 16 créditos de valoración.
Arrancaba la LEB Oro para el Club Melilla Baloncesto en Palencia. Los melillenses salían bien plantados al partido lo que le permitía marchar por delante (2-6) durante los primeros compases del encuentro. De la mano de Grimau los palentinos tomarían el mando, pero el dominio el rebote ofensivo del Decano permitía a los de Alejandro Alcoba aguantar y marcharse tres puntos por debajo en el electrónico (19-16) al final de unos diez primeros minutos en los que se mostró como dominador.
Melilla Baloncesto empataba rápidamente la contienda al inicio del segundo cuarto, pero un nuevo tirón por parte castellanoleonesa, en este caso de la mano de Jorgenssen que, sumado a los problemas en el rebote azulino, daban un colchón de cinco puntos (25-21) a Chocolates Trapa Palencia cuando se acercaba el ecuador de este segundo acto. Tras un intercambio de canasta entre Larsen y Kouyanouba, una antideportiva de Dani Rodriguez sobre Javi Marín y una posterior canasta y adicional por parte de Uclés, permitía a los de la Ciudad Autónoma tomar de nuevo el mando (34-37) a minuto y medio para el descanso. Tiempo que aprovecharía un portentoso Larsen en el poste bajo para mandar a los suyos tres puntos arriba al vestuario (40-37).
El inicio de segunda mitad para los hombres entrenados por Alejandro Alcoba fue inmejorable. Con una gran intensidad y concentración defensiva y con la dupla formada por Agada y Hartwich castigando una y otra vez el aro palentino, el Decano se marchaba en el marcador (44-56) consumidos ya cinco minutos de este tercer cuarto. Un omnipresente Larsen acercaba a los morados desde la pintura, pero dos triples consecutivos de Marín (58-69) daban la tranquilidad necesaria a los melillenses para afrontar el último acto.
La tensión de ser el primer encuentro se notó en el cuarto final. Cinco minutos tardaron ambos equipos en anotar la primera canasta, obra de Bader que ponía el 60-69 en el marcador. Los de la Ciudad Autónoma supieron administrar a la perfección cada posesión, además el dominio en el rebote, ayudaba que el balón siempre estuviera en manos azulinas. Las canastas caían con cuentagotas y un triple de Javi Marín a 1:19 sentenciaba el choque para el Decano que acabó imponiéndose por 69-81.
RUEDA DE PRENSA
