Dos de dos. Así ha empezado la liga el Club Melilla Baloncesto que se imponía que un final de infarto al ICL Manresa por 68-66. Dani Rodríguez fue el encargado de anotar la canasta de la victoria para un conjunto azulino que tuvo en Guerra a su mejor hombre con 23 créditos de valoración.

El choque comenzaba muy igualado entre melillenses y manresanos y con dos claros protagonista, Fran Guerra por el lado azulino y el sueco Lundberg por parte manresana (11-11, min. 7). Melilla Baloncesto no encontraba el acierto exterior que buscaba, aunque tampoco andaba mucho mejor los de Aleix Durán. Con esa igualdad en el marcador se llegaba al final del primer acto (21-21).

El inicio del segundo periodo estuvo marcado por la buena defensa melillense con varios tapones que levantaron al público que se dio cita en el Javier Imbroda y una intensidad que le permitía controlar el ritmo del encuentro y llevar a Manresa al cinco contra cinco. La entrada de Dani Rodríguez y Guerra dio un nuevo aire al equipo, que desde el bloqueo directo conseguía dominar el partido. Solo el desatino, especialmente desde el tiro libre, impidió a los de Alejandro Alcoba conseguir una mayor al descanso (36-32).

La salida de vestuarios de los de la Ciudad Autónoma fue buena. Con la misma intensidad en defensa, y ahora si, anotando desde el exterior, los azulinos conseguían poner máxima de partido 48-39 cuando se alcanzaba el ecuador de este tercer cuarto. Todo parecía de cara, pero apareció Álvaro Muñoz, quien con cuatro triples consecutivos metía a los manresanos en el partido. Melilla Baloncesto intentaba dar la respuesta de la mano de Mamadou Samb, inspirado en este tramo final de cuarto al que se llegaría con una mínima ventaja de dos puntos (55-53) a favor de los melillenses.

En el último acto, la igualdad seguía presente en el electrónico. ICL Manresa lograría hacer saltar las alarmas en el banquillo melillense con un 0-5 de parcial (57-60, min. 34), que Alejandro Alcoba paraba con un tiempo muerto. En la reanudación Kapelan ponía de nuevo las tablas en el electrónico con una lanzamiento triple. A 17 segundos para el final el partido marchaba empatado a 66 y con posesión para los azulinos. Dani Rodríguez asumía la responsabilidad en ataque. Y es que cuando llegan estos momentos, el catalán se sienta en su salsa. No falló. Una canasta suya a falta de 3.7 segundos para el final daba la victoria al Club Melilla Baloncesto por 68-66, y eso que Costa tuvo en sus manos la bola para dar la victoria conjunto catalán.


RUEDA DE PRENSA


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JORNADA 2 | Club Melilla Baloncesto - ICL Manresa