Con solamente un día de descanso, tras conseguir el pasado viernes en el Pabellón Javier Imbroda ante el Unión Financiera Oviedo por 83-64, el Club Melilla Baloncesto ha retomado en la tarde del domingo los entrenamientos para preparar la complicada salida del próximo jueves a Pamplona

Los de Alejandro Alcoba quieren dar un golpe en la mesa, logrando vencer a domicilio tres meses después y hacerlo en una de las canchas más complicadas esta temporada como es la de Planasa Navarra, actual tercer clasificado.

Con poco menos de cuarenta y ocho  horas de descanso, ya que el partido ante los navarras se celebrará el próximo jueves 12 de febrero, el equipo ha comenzado a preparar en la tarde de domingo este próximo encuentro y lo ha hecho con una sesión que ha comenzado a las 19.00 horas en el gimnasio del Javier Imbroda. Posteriormente el equipo se ha traslado a hasta la pista de juego para proseguir con el entrenamiento.

El plan de trabajo para el resto de la semana incluye doble sesión para lunes y martes, mientras que el miércoles por la mañana el Decano llevará a cabo su última sesión preparatoria antes de partir esa mañana hacía Pamplona.