El Club Melilla Baloncesto rompió su mala racha de cinco derrotas consecutivas al enfrentarse con Oviedo en la Jornada 7.

Con jugadas sobresalientes por parte de Alvarado mostrándose totalmente acertado en el tiro de tres, sobre todo en un segundo y tercer cuarto para enmarcar. Las enseñanzas de Monclova hacia su plantel se vieron hoy en la cancha, aclarando su camino en la LEB Oro y logrando la segunda victoria de la temporada alejándose así, del descenso.

Durante la mayor parte del primer cuarto, los azulinos fueron por delante en el marcador, demostrando que deseaban llevarse una victoria en la mochila.  Mulero fue uno de los protagonistas de este buen inicio del encuentro, haciéndonos ver su gran capacidad defensiva y de ataque, por otro lado, encontramos a un Norelia motivado por su regreso a una de sus antiguas casas. Sin embargo, en la recta final del primer cuarto el marcador del Pumarín cambiaría a favor del equipo local, que nos adelantarían con 4 puntos por delante terminando el primer parcial con un 23-19 a favor de Oviedo.

Visualizando una amenaza de poder perder la buena racha hasta ese momento, Monclova intervino, lo que fue un acierto, y remarcó la notable lectura de juego de Alvarado. El base no tiraba tanto a canasta como sus compañeros por su personalidad decisiva y capacidad de calcular cada jugada antes de arriesgarse. Esto hizo mantener un equilibrio durante el enfrentamiento, potenciando las virtudes de sus compañeros de equipo. Uno los beneficiados fue el alero Andrija Marjanovic, quien destaco en el segundo cuarto al anotar triples y tiros libres, cogiendo rebotes en ataque y realizando buenos balances defensivos. El conjunto melillense le dio la vuelta al marcador ovetense yéndose al descanso con 7 puntos por delante, terminando el segundo parcial con un 38-45.

Van Dyke se hizo grande en la pista ayudando a sus compañeros, impidiendo que el equipo contrincante se hiciera con el marcador, que en ese momento estaba tan discutido por el intento de los ovetenses de querer remontar, el escolta estadounidense demostró una gran efectividad en los triples. Todo acabó fluyendo en el equipo azulino, incluyendo mayor solidez defensiva.

Los melillenses afrontaron los diez últimos y tan intensos minutos del encuentro con Oviedo con una considerable ventaja de once puntos (55-66). Un 5-0 de salida levantaban las gradas de Pumarín, amenazando a la plantilla del entrenador sevillano, haciéndole recordar su recorrido en la liga hasta ahora. Pero ante una situación de tensión y duda, apareció Alvarado acompañado de un Norelia sobresaliete en el juego de ataque y en el rebote, gracias a esto, se pudo conseguir una estabilidad y una ventaja que permitieron cerrar un final de partido notable, consiguiendo su objetivo inicial que era llevarse a casa una segunda victoria por parte del plantel azulino.

 

Club Melilla Baloncesto: Andrija Marjanovic (13), Van Dyke (9), Lepichev (10), Mulero (14), Oscar Alvarado (11), Marc-Edy Norelia (11), Hasan Varence (8), Justas Tamulis (3)

 Alimerka Oviedo: Francisco Jose Ribau (5), Dan Duscak (5), Josep Perez Tomas (9), Demetric Horton (11), Mikel Sanz (6), Marc Marti (19), Tunner Stuckman (13), Hall Elisias (1), Robert Cosialls Borras (2)

 Árbitros: Ángel de Lucas, Jesús Marcos Martínez Prada y Francisco González Cuervo.

Parciales: 23-19, 15-26 (38-45), 17-21 (55-66), 16-13 (71-79).