El Melilla Baloncesto cayó ante Cáceres Patrimonio de la Humanidad por 64-60 en el XXIII Trofeo Cáceres Baloncesto, penúltimo test del equipo en esta pretemporada. Los melillenses compitieron hasta el final a pesar de no contar apenas con jugadores exteriores desde el inicio por la ausencia de tres jugadores y la lesión al final de la primera mitad de Alfredo Ott. A pesar de todo el Decano dominó durante varias fases del encuentro e incluso tuvo la oportunidad de poder alzarse con el triunfo en los segundos finales. El máximo anotador del equipo fue Arteaga con 15 puntos, mientras que el más valorado fue van Wijk con 20 créditos.
Los azulinos se presentaban en cuadro en este Trofeo Cáceres Baloncesto. A pesar de ello, los hombres de Alejandro Alcoba arrancaban con fuerza al encuentro y con una gran actividad defensiva, lo que les permitía correr y anotar con facilidad para marcar las primeras diferencias en el electrónico (4-9, min 4). Un robo de van Wijk y posterior mate del holandés permitía a los de la ciudad autónoma mantener una renta de cinco (6-11) y hacía que el técnico local solicitara su primer tiempo muerto a 4.42 minutos para el final del primer cuarto. Los cacereños reaccionarían y de la mano de su juego exterior endosaba un 8-0 de parcial y ponía de nuevo al mando del encuentro (16-11). A pesar de los problemas para atacar en situaciones de cinco contra cinco un mate sobre la bocina de Fall dejaba el marcador con el resultado 16-13 al final del primer acto.
El Decano iniciaba el segundo cuarto con dos bases en cancha por mor de las tres bajas exteriores con las que se presentaba Alejandro Alcoba en el Multiusos, y la cosa funcionó. Un Rivero omnipresente en la dirección y la anotación reducía la diferencia a un punto (21-20,min 13). La actividad de ambos conjuntos bajaba, lo que provocó un intercambio de canasta durante buena parte de este periodo. A tres minutos para el descanso Rivero con su segundo triple de la noche daba de nuevo al mando a los melillenses (27-28, min 17). Los azulinos volvían a transmitir buenas sensaciones y a dominar el ritmo del encuentro, marchándose al descanso con una renta de cinco puntos (27-32). Lo único negativo en esta primera mitad ocurrió a 37segundos, cuando el juego exterior melillense sufría otro varapalo con la lesión de tobillo de Alfredo Ott que le obligaba a retirarse al banquillo.
La segunda mitad comenzaba con un Melilla Baloncesto que volvía a tener problemas en ataque, con numerosas pérdidas, ante un Cáceres Patrimonio de la Humanidad que crecia de y se ponía de nuevo por delante en el marcador con un triple de Sergio Pérez (37-34, min 24). Alejandro Alcoba paraba el encuentro con un tiempo muerto, tras el cual se vio a otro Melilla Baloncesto con las ideas más claras en ataque y buscando siempre a Arteaga como referencia en la pintura. Una canasta de van Wijk ponía a los azulino por delante (37-38). Una diferencia que se mantendría hasta el final de este tercer acto (44-45).
Arteaga imponía su ley en el inicio del último periodo. Los puntos del interior canario mantenían al cuadro de la Ciudad Autónoma por delante (48-53) a falta de poco más de cinco minutos para el final del encuentro. Dos triples consecutivos de Rakocevic ponía a los verdinegros por delante en el marcador y Fuller a falta de 26 segundos dejaba el electrónico en 62-60. Rivero la tuvo, pero el balón no quiso entrar y dos tiros libres posteriores convertidos por Sergio Pérez dejaban el resultado en el definitivo 64-60.
Mañana el equipo se desplazará a Alcázar de San Juan donde a partir de las 20:00 horas, en el pabellón Antonio Díaz-Miguel, afrontará su último amistoso de la pretemporada ante el Seguros Soliss Basket Alcázar.
(Fotos: Cáceres P. Humanidad)