El Melilla Ciudad del Deporte abordaba en el día de hoy un encuentro algo extraño debido a que no se supo si se jugaría o no hasta casi última hora por los problemas meteorológicos causados por la calima. El plantel local se enfrentaba a un durísimo equipo como es el UEMC Real Valladolid Baloncesto, dirigido por Paco García. Antes de comenzar el encuentro, ellos ocupaban la octava posición, por lo que el partido iba a ser de alto calibre. Un partido dominado en casi todos los aspectos por los de Rafa Monclova, hasta el tercer cuarto, donde se vieron superados por un muy buen Valladolid. El juego concluyó con una bola decisiva dentro de la botella a falta de 0,3 segundos, que cayó a favor de los pucelanos, anotándola e imponiéndose así por un punto de diferencia sobre los melillenses (80-81).
El primer cuarto comenzó con un triple del conjunto visitante, que al instante consiguió responder Melilla y situarse así durante todo el primer cuarto por delante en el marcador, concluyendo el primer de los asaltos con cinco puntos de ventaja a favor de los locales (23-18). La clave del primer periodo fue el acierto anotador de los jugadores y el dominio en el rebote.
En el segundo de los cuartos el equipo dirigido por el técnico sevillano arrancó muy mal, recibiendo un parcial de 0-5, lo que le valió a Monclova para solicitar un tiempo muerto y arreglar el mal rendimiento de los primeros minutos. Esa ventaja la rompió Óscar Alvarado tras anotar un increíble triple, acompañado de una canasta de Andrija. El mismo Alvarado, en la siguiente jugada, forzó una falta que valió por tres tiros libres para aumentar más la ventaja, y es que era el canario quien se estaba echando el equipo a la espalda. Tras unos malos minutos del Decano, el conjunto visitante se puso por primera vez en el encuentro, por delante en el marcador, pero poco tardó Sofiane Briki en anotar un triple para volver a darle la vuelta a la situación y que el partido se marchase a favor de los melillenses (45-44).
Un mal tercer cuarto en general por parte del Melilla Ciudad del Deporte fue lo que condenó el resto de lo sucedido en el Javier Imbroda, y es que el equipo que hasta ahora había dominado en los aspectos ofensivos y defensivos, se vio totalmente superado por un Valladolid que demostró un juego interior muy rocoso, superó a las filas locales. El Decano se marchó al último cuarto únicamente habiendo anotado catorce puntos y habiendo recibido veintiuno, por lo que se le complicaba el partido (59-65).
El final del partido fue vertiginoso, y es que fue un absoluto toma y daca por parte de ambos equipos. Melilla dominaba de nuevo el partido y controlaba el ritmo y las jugadas. Parecía ir todo de cara, pero algunas imprecisiones en la entrega y en el tiro y rebote, le costaron pérdidas absurdas de posesión, que aprovecharon los de Paco García para dar pausa al partido y frenar el ímpetu de sus contrarios. Un partido que se fue a más de ochenta puntos para cada uno de los equipos. Tras varios rebotes en lo que parecía una última posesión para los pucelanos, consiguieron encestar en el último suspiro, a falta de 0,3 segundos, anotar una canasta para poner a Valladolid un punto por encima que finalmente mataría el partido. Rafa Monclova solicitó un tiempo muerto para intentar una última jugada que finalmente no salió y finalizó el partido 80-81 a favor de los pucelanos.
Melilla Ciudad del Deporte: Óscar Alvarado (10), Parker Van Dyke (24), Hasan Varence (11), Bryce Douvier (23), Tomislav Buljan, Andrija Marjanovic (4), Héctor Figueroa, Guillem Arcos, Guillermo Mulero, Javier Menéndez (3), Mario Delas (1) y Sofiane Briki (4).
UEMC Real Valladolid Baloncesto: Mike Torres (6), Devin Schmidt (15), Juan García-Abril (6), Sergio de la Fuente (3), Lucas N’Guessan (10), Martynas Zigmantavicius (2), Jaan Puidet (14), Herve Kabasele, Maj Kovacevic (9), Jaime Fernández (3), Lotanna Nwogbo (13) y Romaric Belemene.
Árbitros: Morales Ruiz, Lezcano y Colomer Castelló.
Incidencias: Los árbitros reflejaron en el acta, que el jugador del Real Valladolid, Devin Schmidt insultó e increpó al jugador del Melilla Ciudad del Deporte, refiriéndose a él con expresiones como: “You p*ssy!, You b*tch!”. El jugador Tomislav Buljan fue expulsado tras la acumulación de cinco faltas.