La tercera derrota consecutiva del Melilla Ciudad del Deporte se produjo a manos del San Pablo Burgos.
Lo sucedido en el Coliseum Burgos significó el segundo castigo más severo de la temporada, por 27 puntos de diferencia, siete menos que en la visita del 1 de noviembre al ICG Força Lleida. El Melilla, situado por la zona media de la clasificación, se vio superado en todas las facetas del juego, padeciendo el acierto de los exteriores rivales y siendo incapaz de plantar cara en la batalla por el rebote. Unos primeros minutos de igualdad, con un Melilla coral que encontró los puntos en las manos de un entonado Douvier, pronto dieron paso a una fase del encuentro manejada por el conjunto local. Las pérdidas de balón de los pupilos de Rafa Monclova permitieron correr a un San Pablo Burgos que, impulsado por el acierto exterior, comenzó a abrir brecha en el marcador, lo que condujo al primer tiempo muerto del entrenador sevillano (18-11). Sin embargo, los visitantes no fueron capaces de revertir la dinámica y, así, la diferencia aumentó hasta 11 puntos a la conclusión del primer cuarto (26-15).
Ristic amplió distancias para los locales al poco de comenzar el segundo cuarto, pero Alvarado, en una buena acción individual, y Van Dyke, desde la media distancia, lograron recortar distancias. Lolo Encinas, técnico local, decidió detener el encuentro (28-19). Kasibabu y Lapornik se encargaron de frenar la reacción del Melilla, pero el regreso a pista de Douvier volvió a impulsar el ataque de los de Monclova al convertir cinco puntos consecutivos. Briki y Alvarado se sumaron al buen momento del decano con sendos triples, dejando la ventaja local en solo dos puntos (35-32). No obstante, el Melilla se topó de nuevo con el acierto de los hombres exteriores del San Pablo, que encadenó tres triples al filo del descanso (46-34). Después de un tiempo muerto, la pizarra de Rafa Monclova surtió efecto y, así, Van Dyke recortó distancias desde el perímetro antes de encarar el camino a los vestuarios (46-37).
El Melilla siguió pecando de falta de solidez y continuidad en su juego, lo que llevó a los locales a poner tierra de por medio, merced a la superioridad de Fischer bajo los aros y con un Vene en auténtico estado de gracia (61-44). Monclova volvió a parar el encuentro y trató de arengar a los suyos para reengancharse al encuentro. Un arreón de Van Dyke y la aportación de Arcos, éste con un triple, rebajaron la renta del Burgos a 16 puntos como broche al tercer cuarto (70-54). Sin embargo, un parcial 10-0 de arranque del último cuarto sepultó las ya de por sí ínfimas opciones de remontada de un Melilla falto de intensidad para frenar las embestidas del rival. Douvier, el más destacado de los jugadores visitantes, continuó aportando hasta convertirse en el máximo anotador del encuentro (20 puntos), a los que sumó ocho rebotes, pero su esfuerzo, escasamente secundado por los compañeros, resultó en vano, con lo cual el Melilla encajó una nueva derrota, la tercera seguida, que dejó, además, evidentes sensaciones de debilidad termiando el partido con un 99-72 en el marcador.
San Pablo Burgos: M. Speight (5), E. Atic (12), A. Barerra Pasan (14), S. Vene (13), J. Kasibabu (14), D. Ristic (6), I. Rosa Pompido (2), M. Lapornik (15), R. Rogic (3), L. Fischer (15)
Club Melilla Baloncesto: Andrija Marjanovic (2), Héctor Figueroa (5), Parker Van Dyke (10), Guillem Arcos (3), Guille Mulero (2), Óscar Alvarado (8), Soufiane Briki (14), Bryce Douvier (20), Hasan Varence (8)
Árbitros: Lizana Moreno, Joaquin, Garvin Domingo, Rodrigo, Chueca Moreno, Ariadna