El Cadete no pudo terminar su participación en el Campeonato de España de Clubes al caer por 63-73 ante Seguros Oca Clavijo. Un partido igualado, donde el resultado no marca la gran igualdad durante todo el partido. Los hermanos Chekri volvieron a ser los mejores de los azulinos.
El encuentro comenzaba igualado en el Pabellón Parque, si bien el mayor acierto exterior de los riojanos les daban las primeras ventajas en el marcador (9-16) llegados al ecuador del primer acto, lo que obligaba a Manolo Álvarez a parar el partido. Los problemas a la hora de atacar la zona, como ya ocurrió en el día de ayer, unido de nuevo al desacierto hizo que los logroñeses tomaran una ventaja de nueve puntos (18-27) al final del primer cuarto.
Mejoraba el equipo en el segundo gracias a la presión que dabas sus frutos y permitía a los melillenses robar y anotar con facilidad para rebajar la diferencia a solo cuatro puntos (26-30), a seis minutos para el descanso, y que obligaba a Clavijo a solicitar tiempo muerto. Dos triples consecutivos daban el mando del partido al equipo (32-30). El acierto continuó hasta el final de cuarto, pero los problemas en el rebote continuaron castigando a los melillenses que se iban dos abajo a vestuarios (40-42).
El inicio de la segunda mitad estuvo protagonizada por la igualdad y las numerosas pérdidas en ambos conjuntos. Melilla Baloncesto dominaba más el rebote, pero no estaba acertado de cara al aro, tampoco desde el tiro libre, cosa que de momento no le impedía seguir en partido al final del tercer cuarto al que se llegaba con 49-52 a favor de los riojanos.
El rebote y la precipitación en ataque volvían a ser los peores enemigos de un conjunto melillense que veía como Clavijo, en un choque muy igualado, se escapaba por siete puntos (57-64) a cinco minutos del final. No pudo ser y al final el equipo cayó por 63-73 una diferencia excesiva para lo realmente visto en la pista.